Nada resulta tan satisfactorio como dar un nuevo aspecto a tu casa o a tu cuarto de baño. Tanto si se trata de un conjunto completamente nuevo, de una remodelación del espacio o simplemente de un cambio completo de decoración y accesorios, cuando se hace bien, será una inversión que marcará la diferencia.
Pero antes de emprender este tipo de proyecto, hay algunas preguntas clave que debes hacerte, para asegurarte de que tomas las mejores decisiones para tu presupuesto y para la comodidad de tu familia.
¿Cuál es mi presupuesto?
Es esencial fijar un presupuesto antes de empezar este tipo de proyecto. Saber de cuánto dispones en cuanto a materiales, mano de obra y calidad de los accesorios que puedes elegir te garantizará que no gastas de más y que obtengas los mejores resultados con lo que te puedes permitir.
¿Es un baño para una o dos personas?
El segundo factor a tener en cuenta es a cuántas personas va a atender el baño. Un cuarto de baño para dos personas requerirá, como es natural, instalaciones diferentes a las de uno que sólo utilice una persona.
Piensa detenidamente en esto, y en los tipos de ocupación de los miembros de la casa, para asegurarte de que consigues el equilibrio adecuado entre las opciones de lavado, ducha y aseo.
¿Cuántos productos almacenamos?
El tercer aspecto a tener en cuenta es qué tipo de instalaciones de almacenamiento necesitarás. Dependiendo del número de ocupantes y de las preferencias de los productos de aseo y belleza, puede que necesites más espacio de almacenamiento del que crees.
Desde un armario de almacenamiento básico para los artículos de aseo, hasta estanterías y espacio en la encimera para otros productos, necesitas tener una buena visión general de lo que necesitas almacenar, para tomar decisiones acertadas sobre los accesorios que elijas.
¿Bañera o ducha?
El cuarto factor a decidir es si vas a optar por una bañera o una ducha. Esto dependerá en gran medida del tamaño del espacio.
Si la habitación es relativamente espaciosa, puedes permitirte el lujo de tener ambas cosas. Si, por el contrario, el cuarto de baño es más pequeño, quizá sólo tengas que decidirte por uno de los dos, en función de tus necesidades y preferencias.
¿Qué tipo de estética prefieres?
El quinto aspecto en el que debes pensar es el tipo de estética que te gusta. Es probable que esto se refiere principalmente al tipo de estilo que te atrae para el elemento decorativo, pero también al tipo de herrajes y accesorios.
Tómate tu tiempo para pensar en tu forma de decorar, el tipo de materiales que prefieres y tu estética preferida, para asegurarte de que todos estos factores confluyen en el tipo de ambiente que aspiras a crear.